El viernes pasado nuestra profesora de lengua Cami Aliberti nos dejo una actividad creativa. Esta consistia en esvribir nuestra propia historia en un pais maravilloso como el del libro que estamos leyendo con Cami este trimetre «Alicia en el Pais de las Maravillas». En este nosotros teniamos que ser los protagonistas de nuestra historia por lo cual el cuento esta relatado en primera persona.
Actividad Lengua
Mi aventura en el País de las Maravillas
Hace un tiempo ya, me encontré perdida, sin rumbo por un extenso camino naranja, rodeado de extraños árboles los cuales hacían muecas y sonidos agudos. Estaba pérdida en este mundo maravilloso tan diferente y distinto al mío. Camine varias horas por ese sendero que parecía no tener final, hasta que de pronto me tope un extraño animal el cual venía cantando. Era una extraña mezcla de perro y halcón, ya que tenía cuanto patas, era muy peludo y veloz pero tenía también grandes alas y coloridas. Su nombre era Maximus, era alegre y amigable pero a la vez muy tímido. Estuve bastante tiempo conversando con él hasta que me hizo una pregunta que me dejó pensando. “Vos qué haces por acá?”, la verdad que ni ahora se como y porque aparecí en esas tierras fantásticas. Maximus me dejo caminar con él hasta que tuvimos que despedirnos, yo no sabía bien que hacer ni a dónde ir pero decidí doblar y caminar por un sendero violeta. De tanto caminar ya me dolían los pies, por eso decidí sentarme a un costado del camino apoyada en un árbol. De pronto el árbol comenzó a atraparme con sus raíces, yo desesperada, traté de desatarme rápido pero me fue imposible, un árbol me tenía atrapada. Estaba tan asustada que comencé a llorar con desesperación, cuando de repente enorme un dragón de color amarillo apareció volando velozmente lanzando fuego color verde de su gigantesca boca. Cuando el dragón sobrevoló por arriba de el árbol que me tenía atrapada sus raíces me soltaron, por el miedo que este animal le provocaba y por suerte yo reaccioné rápido y comencé a correr. De tanto correr tropecé con una roca y caí al piso. No podía creer que todo me salía mal, tenía toda mi rodilla lastimada y dolía mucho. Poco a poco escuché pisadas que se acercaban hacia mí, cuando di la vuelta vi detrás mío un zorro pequeño, era bastante extraño ya que era todo blanco, tenía grandes dientes y también tenía unos ojos verdes muy profundos e hipnotizantes. Recuerdo bien lo que me pregunto;
-“ ¿Que hace por aqui sola ? ¿Estas perdida muchachita?»
-“ E ee -solté nerviosa- no, digo si, va creo, no se bien donde estoy, tropecé con una piedra y me arde mucho la rodilla, no se a donde voy”
– “Estas en tu día de suerte, yo te puedo ayudar con tu lastimadura, pero
tu tienes que hacer un favor por mi”
-“ No se- solté yo con la desconfianza que me caracteriza- ¿Que tipo de favor?”
-“ Necesito que entres por el laberinto de los recueros y me traigas una rosa blanca del sector de los sueños”
-“ ¿Y eso donde queda? ¿Una rosa blanca, para que la necesitas?”
-“ ¿Queres que te ayude con tu rodilla lastimada o no? Sabes que mejor hagamos otro trato mejor, yo te ayudo con tu rodilla y también a salir de acá y vos haces lo que te pedí, pero con una condición, tienes 3 días para lograrlo”
La idea de volver a casa me alegro bastante, volver con mis papás y mis amigos incentivo a aceptar la propuesta que este extraño animal me ofreció. Vertió sobre mi rodilla un extraño líquido color rojo y como por arte de magia mi lastimadura no estaba más. Dos horas después de que el pequeño zorro me indico el camino hacia el laberinto llegue a destino. Era un inmenso laberinto color verde el cual tenía muchas enredaderas y arbustos. Entre y comencé a caminar, era muy bonito pero confuso a la vez por eso mismo decidí marcar bien fuerte con mi pisada por donde iba caminando para recordar el camino de vuelta. Anocheció y yo no sabía bien donde estaba, se escuchaban muchos ruidos de animales chillando. Decidí apoyarme en un arbusto y tratar de dormir, estaba muy cansada para seguir. La mañana siguiente desperté con gotas cayéndome en mi cara, estaba lloviendo y eso me encantaba a pesar de que terminaría toda mojada. Comencé a correr bajo la lluvia hasta que me di cuanta que el agua de la lluvia de este mundo tenía un sabor muy salado como el del mar. Luego de que parara de llover me crucé con una familia de patos. Me acerqué para preguntar si ellos sabían donde quedaba el sector de los sueños. Apenas nombre este lugar los patos se sorprendieron por mi pregunta y me indicaron el camino. Estaba caminado ya cansada y un tanto rendida cuando comencé a sentir un rico perfume me cerca, olor a flores. Cuando llegue hacia ese lugar había todo tipo de flores de todos los colores y todas hablaban algo que me sorprendió profundamente. Cuando fui al sector de las rosas eran todas rojas salvo una que estaba escondida en el fondo, la única blanca. Cuando la arranque escuche una voz que me decía;
-“ No por favor no me lleves con ese monstruo”
Inmediatamente me sorprendí y me di cuanta que la quemé hablaba era la flor
-“ ¿Podes hablar?”
-“ Por supuesto que si, por favor no me lleves con el zorro, el solo me quiere para terminar una poción que está haciendo la cual lo convertirá el más poderoso, yo soy su último ingrediente”
-“ No entiendo si sos tan esencial para el ¿Porque no entró el a buscarte?
-“ Porque a este laberinto solo pueden entrar las criaturas puras de alma, las que no lo son no pueden ver ni entrar en el”
– “Wow, pero el me prometió llevarme a casa de vuelta si te entregaba”
-“Por favor no lo hagas”
No podía entregar a la rosa a un ser tan malo pero tampoco podía resignarme a nunca volver a casa, no sabía que hacer hasta que se me ocurrió un perfecto plan. Este consistía en hacerle creer al zorro que le iba entregar a la flor y cuando habrá el portal para llevarme a casa haré un rápido movimiento para llevarme la flor conmigo y que el no pueda alcanzarla. La flor aceptó la idea de venir a mi tierra por eso pusimos en plan en marcha. Cuando empezamos a volver me di cuenta que mis huellas en el piso se habían borrado por la lluvia y comencé a desesperarme ya que me quedaba poco tiempo para que se cumpla el último día para llegar con la rosa blanca. Para mi buena suerte la flor conocía perfectamente el camino por lo cual pudimos encontrar la salida sin dificultad. Cuando llegue al lugar donde había visto al gato por primera vez estaba el con un portal abierto por el cual me emocione estaba tan cerca de volver a casa. Cuando el gato vio que tenía la rosa en la mano también se alegró y dijo;
-“ Muy bien niña, dame la rosa y métete por el portal hacia tu casa”
– “ Claro ahora te la doy primero ¿me puedo acercar al portal para ver si se ve algo?”
– “ E si claro ve y mira”
Cuando me acerque al portal pegue un salto tan grande que caí por un gran tubo con la flor tomada. Mientras volaba podía escuchar el grito del gato diciendo
“te voy a encontrar y me las vas a pagar”
De pronto tocamos el piso, abrí los ojos y estaba mi bello jardín con mis hamacas y mi linda casa, no podía ser más feliz, devuelta en mi mundo.